Shikai - Caminata por el parque

Hoy es el cumpleaños de un gran amigo, uno que conozco desde hace años y que pese a una gran cantidad de diferencias a lo largo del tiempo, prevalece. También es él quien inspiró la personalidad que tomé para crear a uno de los tantos personajes de Shikai, Imation, y por ello, en homenaje a los años de amistad decidí crear un capítulo enfocado en la amistad que tiene con Hialek, dándole un toque reflexivo respecto al paso del tiempo y los cumpleaños.
Andrés, este capítulo está dedicado para ti. Espero tengas un muy feliz cumpleaños, my friend. Te mando un fuerte abrazo que podrás descargar e instalar el día que nos veamos (Que ambos sabemos está a la vuelta de la esquina). Felicidades!!

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Y entonces lentamente se detuvo mirando hacia el suelo y observó su sombra con melancolía y nostalgia. En ella no había expresión que delatara lo que sentía, ni mueca que revelara sus mentiras o su dolor. Se alejó y acercó varias veces a uno de los tantos postes de luz en ese largo y verde pasillo, el sendero de un parque poco visitado a esas horas de la noche, y notó que podía ser todo un adulto o un niño con solo quererlo, todo era cuestión de perspectiva. Observó sus manos y lentamente dibujo en su mente sus manos, sus brazos y trató de imaginarse frente a sí mismo, lo que en realidad hubiera deseado era poder tenerse de frente, llenarse de insultos y sobre lo idiota que había sido en el pasado y culminar con un golpe directo al rostro que le enseñara de una vez por todas a dejar de caer en los mismos errores. ¿Acaso todos estos años no le habían convertido en lo que ahora era? Claro que así lo creía y eso era lo que odiaba, en lo que se había convertido. A veces deseaba poder encontrar una forma de reiniciarlo todo, pero sabía que incluso pudiendo regresar al pasado, seguramente haría lo mismo, o encontraría una forma alternativa que igualmente le llevaría al mismo destino, no porque no se creyera capaz de encontrar una forma de controlar su propio destino, sino porque en ese desprecio a su presente y a los errores del pasado, igualmente podía siempre ver infinitas opciones en su futuro y eso siempre le había agradado. ¿De qué se quejaba entonces?

Un poco mareado y con un nudo en la garganta avanzó por el sendero y poco a poco el sonido del fluir del agua comenzó a oírse, el río que bordeaba al parque se acercaba y agitaba, como si a gritos quisiera la atención de quien en su interior no oía más que gritos. Siempre le gustó ver detenidamente el río, siempre seguro de sí mismo, avanzando con fuerza por más obstáculos que le pusiera. Recordaba como de pequeño arrojaba rocas y tierra tratado de detenerle, pero no lograba más que desviarle por un momento y luego veía como poco a poco, sin rendirse, el agua terminaba por llevarse el obstáculo y lo arrastraba, como si hubiera ganado una nueva arma, como si el obstáculo no fuera más que nuevas fuerzas y experiencias para continuar hacia algo más grande, con seguridad un mar en donde podría rugir con fuerza ante el resto y vivir en paz en la inmensidad de su majestuosidad bajo un sol que cada día le rendiría tributo y cortesía al ponerse a su nivel ante los ojos de todos para finalmente ser reconocido, iluminado y elevado por una belleza incandescente que también podría darle momentos de tranquilidad. ¿Por qué no podía ser así de valiente y tenía que ver que solo sus lágrimas fluían con tal libertad?

Sin mucha dificultad saltó hasta una pequeña baranda que dividía al sendero y al río unos metros más abajo y se mantuvo en equilibrio sobre ella. Extendió sus brazos como entregándose al destino, cerró los ojos y se mantuvo en oscuridad, una que incluso invadió su corazón y comenzó a nublar su mente, la cual pensó en dejarse caer y acabar con toda esa frustración, acabar con toda esa indecisión.

Una respiración intensa le sacó del trance, sintió una mirada intensar sobre él, una ligera sensación de desconcierto y un toque de ira. Hialek bajó los brazos, giró lentamente, sin bajar de la baranda y sin perder el equilibrio, y pudo ver a quien le acompañaba, Imation. Este le dirigió una mirada decepcionada al inicio, apenada después, tranquila finalmente, pese a que Hialek solo le había observado la primera y se vio obligado a quitar la mirada para evitar sentir la decepción que por él sentía. Su primer impulso fue mirar al suelo, pero luego pensó que en realidad le gustaría poder irse volando. ¿Qué tanto podía haber interesante en la tierra?

Imation le extendió la mano para ayudarle, cual niño, a bajar de la baranda de un pequeño salto. Hialek casi inconscientemente la aceptó y de un salto bajó. Luego, sin soltarle, le tiró ligeramente y le dio un fuerte abrazo.

- Felicidades, amigo mío. Hoy cumples un año más, lo cual quiere decir que ha pasado todo un año desde la última vez que te abracé felicitándote por haber cumplido un año desde la vez anterior a esa – Imation le dio unas palmadas leves a Hialek. Leves, porque sabía que no le agradaba mucho ese gesto que supuestamente representaba masculinidad.

- Tú y tus expresiones extrañas, ¿de dónde salen tantas ideas y pensamientos? La verdad es que podrían ser un gran don si no fuera porque los utilizas con… - se interrumpió para evitar decir algo dañino y entonces se corrigió –…para fines mal orientados-

Una corta e incómoda pausa se presentó ante ambos. De Hialek por no saber como interpretar esa frase, de Imation por creer haber dicho algo hiriente… ninguno tenía motivo o razón, pero así era.

- Así que… harás una celebración en casa, como de costumbre, este fin de semana ¿eh? –

- Sí. Me gusta reunir a mis amigos y celebrar un rato. Ya sabes, comida, bebida, música, mucha gente. Nada mejor que eso, ¿no crees? – La pregunta dejó a Hialek meditando un momento.

- Me alegro mucho de que seamos amigos –

- ¿Y eso a que va? – Hialek solo miró hacia el río por un momento en silencio, luego se sonrió pese a sentir una profunda punzada en su corazón y miró a Imation – A veces eres solo un tonto adorable, ¿lo sabías? En el fondo, apenas si has cambiado pese al paso de los años –

- Bueno… - Hialek miró entonces al cielo – así como el cielo no es más que la historia de objetos y seres que estuvieron y pueden o no estar hoy, nuestra amistad cuenta lo que fuimos y a veces esa forma original que ambos vimos del otro, puede mostrarse o no. Lo importante es que sin importar donde estemos, basta con buscar una referencia brillante y todo el resto tendrá sentido e incluso podrá guiarte al estar perdido… Lo que puede guiarte incluso a más personas que serán nuevas estrellas en el cielo. No es tan loco imaginar a las personas como las estrellas si ese es el caso –

Imation quedó impactado por un momento con aquellas palabras, rato en el que Hialek caminó lentamente hasta la baranda y se inclinó sobre ella. Allí miró lacónicamente al río una vez más, por un momento.

- ¿Estás bien? – Preguntó Imation para romper el hielo una vez más.

- Lo estaré… - Hialek no cambió de posición ni miró a Imation al responder -…ya sabes, de vez en cuando me pregunto incluso por un motivo para buscar la felicidad, es que a veces simplemente no tiene sentido siquiera eso. Y cuando llega un nuevo año de algo, veo que el tiempo pasa y pese a las grandes experiencias, los lindos momentos, los desafíos y las metas alcanzadas, igualmente me pregunto, ¿y para qué hago todo eso? Pero entonces yo mismo me respondo y veo que en realidad no hace falta una razón y, desde luego, lo siguiente es preguntarme para qué me detuve a pensar en ello en primer lugar, volviendo al ciclo. Es… un poco desesperante ¿sabes? –

- Imagino que sí, pero ¿sabes para qué me detengo a pensarlo yo? – Hialek negó con la cabeza – ¡por lo que tu mismo me mostraste! –

Hialek quedó desconcertado por un momento. Se giró en la baranda, cruzó piernas y brazos, demostrando su temor a la respuesta, posición defensiva, y mostró su interés con la mirada.

- Las estrellas, amigo mío – Imation levantó su brazo y dibujó un arco de estrellas en el cielo – no sabemos si están ahí o no, pero las vemos y pueden guiarnos, eso me dijiste.  Si somos estrellas antiguas, cada año que cumplimos es un logro y significa que nos convertimos en guías para más y más personas. Y si brillamos con suficiente fuerza, al morir, igual habrá mundos que nos observarán y personas a las que guiaremos durante varias décadas tras desaparecer físicamente, porque nuestra luz podrá seguir ahí para ellos. Cumplir un año más es solo la opción de descubrir nuevas formas de brillar y conectarse con más gente cada vez solo puede llevarnos a eso –

Imation apuntó entonces a la enorme cadena de estrellas, el sector más brillante del cielo, aquella unión que causa sensación y admiración a todo quien le observa con detención, la vía láctea.

- ¿Y esos pensamientos de dónde salen? – repitió Hialek sonriendo.

- No lo sé, pero estaré bien, ya sabes, de vez en cuando me pongo reflexivo y me pregunto por alguna forma de sacarte un pensamiento oscuro de la mente y una sonrisa de esa cara de tonto que tiene – Entonces una carcajada afloró desde la gran caja torácica de Imation y Hialek le acompañó, al contagiarse, con una sutil risa.

- Feliz cumpleaños, Imation. En serio, eres un gran amigo, desde que comenzamos a apoyarnos sabía que esto sería un lazo especial, bueno… desde que empezaste a apoyarme más bien, tu comenzaste – Hubo un silencio incómodo que astutamente Hialek rompió - Supongo que nos veremos para tu fiesta entonces, ¿no? –

- Solo si llevas un gran regalo y este es mucha comida o unos excelentes puños cromados – Le respondió Imation con una sonrisa burlesca.

- Pues ni modo, tendré que revender lo que tenía para ti –

- ¿Eh? ¿Ya me tenías algo? ¿Sabes qué solo bromeo, verdad? –

- Pues ya es muy tarde, ahora tendrás que conformarte con algo mucho más pequeño –

- ¡No es justo, pequeño tramposo! Ya lo tenías todo planificado, ¿verdad? –

- ¿De qué hablas? ¿Acaso de la forma que utilicé para saber que es lo que te gustaría como regalo? ¡Ah! Pues sí, ya lo tenía planificado –

- ¿¡O sea que ni siquiera me tenías algo!? – Hialek comenzó a escapar riéndose entrecortado por cada paso.

- Deberías pensar menos… - Dijo Imation antes de comenzar a perseguirle caminando, sus pasos eran lo suficientemente grandes como para perseguirle de ese modo, además, sabía que Hialek en realidad no quería alejarse -… pero si es cierto lo que dices, pese a que ni tu mismo te das cuenta. Cumplir años no tiene sentido, quizá ni celebrar el cumpleaños, pero si te acerca más a la gente que te rodea y esos lazos son los que de verdad valen la pena. Eso y lo que mejoras cada vez. Es una referencia de tu crecimiento, de tu evolución, una muestra de que eres mejor que hace un año, es completar un ciclo más. Verlo como una cuenta regresiva o una escalera es cosa de cada uno, así como ver el futuro con miedo o como una oportunidad lo es –

Y entonces, en sincronía, ambos mirando al cielo, pensaron:

- Eres una gran persona que algún día brillará, sin importar el tiempo. Y me alegro de que seas mi amigo –

Entonces avanzó un par de pasos y observó su sombra bajo uno de los tantos postes de luz en ese largo y verde pasillo, el sendero de un parque poco visitado a esas horas de la noche, y notó que pese a que muchas veces se sentía maduro y fuerte, y que su enorme y musculoso cuerpo así lo denotaba, en cualquier momento podía verse como un niño. Todo era cosa de perspectiva. Y entonces, corrió tras Hialek con una sonrisa, y este tras un momento de desconcierto reanudó su escape entre risas. Siempre podían darse un momento para jugar, eso es algo que por más tiempo que se deje de hacer, nunca se olvida.

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Feliz cumpleaños :)

Edición: Encontré un par de imagenes bonitas para ambientar x3

Una improvisada melodía y aún más improvisada letra me atacó al trabajar.

Corriendo en la oscuridad, es como siento al viento.
Mirando hacia la nada, es como escucho a tu corazón.
Oyendo solo ruidos, es como llego a entender.
Te odio cada día y es por eso que no puedo sacarte de mi mente.
Y como sigues en mi mente es que no puedo dejar de quererte.

Que desperdicio de tiempo es seguir en el mismo lugar.
Pero al menos es mejor que seguir como antes,
Cuando solo sabía mirar atrás, creer que era mejor, y regresar.

Caminando en la luz, es como ardo en fuego.
Mirando hacia el total, es como escucho tu voz.
Oyendo tu voz, es que entiendo a los demás.
Te amo cada día y es por eso que caigo en obsesión.
Y como sigues gritando en mi interior es que decido partir una vez más.

Que desperdicio de lugar es seguir en el mismo tiempo.
Pero al menos es mejor que seguir al futuro,
Sin un plan, creer que es mejor, y fallar.