sábado, 25 de julio de 2009

Como duele crecer - Adios al Eternal Kid




Cuando dije que había abandonado mi creencia en el "eternal kid" y todos los sueños que impulsó, hablaba en serio... es un sueño muerto, una búsqueda que no se repetirá...

El eternal kid fue un intento de lograr que la gente aceptara lo inaceptable. Un juvenil sueño de revolución, como la mayoría lo tiene en algún momento. Solo que mi revolución no necesitaba de gritos o de mover masas, necesitaba cambiar pensamientos y estimular corazones.
Fui una suerte de fanático religioso, un buscador potente de afecto y caricias, porque era lo que me gustaba y que sabía que a la gente le incomodaba.

Sin embargo, el proceso, las consecuencias y el resultado era exactamente el mismo en cada caso. Siempre era yo quien estimulaba, lograba mi cometido y el otro actuaba, dejaba que realizara los actos y los repitiera si quería, luego venia una distancia, culpabilidad y rechazo.

Sin embargo, a pesar de la incomodidad que generaba tanto para mí, aunque sin duda más para el otro, dejaba pasar un tiempo y luego trataba el tema. Y de alguna forma siempre terminaba siendo el culpable o el que supuestamente estaba más afectado.
Cada uno de los que se justificó, intentaba disculparse y me daba explicaciones aludiendo siempre a "pero contigo no importa", "pero tu eres diferente", "pero contigo es otra historia". Como si realmente fuera algo malo, como si tuvieran que justificarse conmigo. Y cuando les decía que para mi no era extraño, que para mí era normal, un buen recuerdo, de alguna forma se molestaban y decían "pero sé que no hay malas intenciones" o "sé que no es malo"... más justificaciones y más excusas.
Mis intentos de aliviar las tensiones y quitar el nerviosismo se transformaban en algo aún más inútil y a la larga, lograba explicar toda la situación, pero nunca lograba entender el problema de los demás.

Me consideraba inocente, consideraba inocente al acto e inocente mi pensar.
Mi inocencia en ese aspecto realmente no está corrompida. (Para que se entienda cuando bromeaba diciendo "quieres corromper mi inocencia?").

Intenté por años explicar que es lo que estaba mal con mi sueño... y me di cuenta de que no había nada, mi sueño era perfecto, maravilloso, ideal... un sueño.
Me di cuenta de que la incomodidad viene de la corrupción de las mentes de los demás, del miedo corrompido al "que diran", "que pensaran".
Me di cuenta de que el problema viene de la sociedad... que expone el sexo como cualquier cosa, pero mientras no toque a su familia y que, también, es completamente homofobica, tanto, que no aceptan ni siquiera lo que NO ES, PERO PARECE homosexual.
El problema es la sociedad... mi lucha, como cualquier revolución, era en contra de la sociedad y el rechazo.

Mi lucha no fue un desastre o una aplastante derrota. Tuve un fuerte impacto, llegué profundo en muchísima gente. Marqué muchas vidas y cruce muchos caminos que no tenía destinados de otra forma.
Logré vencer muchos rechazos, logré que gente se mantuviera junto a mí por años a pesar de mis actos. Y concretar lazos amistosos tan potentes, que cruzan la linea que divide mi vida y se mantienen igual o más poderosas que al inicio, que hoy están más alto que en cualquier otro momento.
Solo en un caso el rechazo fue más fuerte que el aprecio y es la historia que tuvo su termino por coincidir con el paso a mi adultez. Es la historia que me hizo decidir que ya había experimentado suficiente con el sueño que era el eternal kid.

Todos los recuerdos y todas las situaciones que conseguí gracias a ese niño eterno, hoy no pueden ser más que eso.
Si menciono las situaciones, las personas se sienten incomodas y se alejan, por alguna razón se sienten casi arrepentidas de haber vivido un sueño, de haber sido capaces de iniciar un sueño. Mi objetivo y mi acto siempre fue impulsor, nunca sometí, nunca obligué... solo fui como quise ser (la frase fundamental del eternal kid: "seré como quiera ser"). Expresé mi cariño por todos, no diferencié edad, sexo, procedencia, status, nada. Abracé, besé y acaricie siempre con intención limpia.

Me trajo críticas, apodos, peleas, enemistades, decepciones, sufrimiento. Pero también me dio por mucho tiempo una razón de existencia y una enorme felicidad. Se convirtió en mi reemplazo a todo, incluso al amor de pareja, el cual era muy dificil de sentir y/o diferenciar, ya que lo que yo buscaba sentir con todos era franco amor, con lo que cualquier cosa sexual estaba de lado para mí.

Pero ya me cansé de repetir la misma historia y el mismo fracaso. Ya estaba cansado antes de hacer un último intento que resultó ser el más doloroso, frustrante y decepcionante de todos.

Mi historia continúa, pero ya no puedo ser el eternal kid... debo comenzar con lo que aplacé, ser un joven y adulto que solo intenta compatibilizar sus sueños en la realidad que le tocó vivir, aunque esta sea un duro y doloroso golpe para cada uno de sus sueños...

Así es la vida...